Antecedentes

¿Cómo inicia el Instituto Tecnológico de Culiacán?

En 1963, hizo una visita a Culiacán el Ing. Víctor Bravo Ahuja, Subsecretario de Enseñanza Técnica y Superior de la Secretaría de Educación Pública. Durante la visita, el Ing. Luis Cisneros Zazueta, Director de la Escuela Técnica Industrial y Comercial No. 23, ETIC No. 23, (la antigua “Prevo”) invitó al alto funcionario a hacer una visita a la Prevo.

Bravo Ahuja se percató de un edificio en ruinas, el techo amenazaba con desplomarse, tenía cuarteaduras en las paredes apuntaladas con grandes maderos; conmovido con lo que estaba viendo, separó a Cisneros Zazueta y le dijo: “Lo autorizo para que dé una buena noticia a estudiantes y maestros de la Prevo: Pronto se construirá el Instituto Tecnológico de Culiacán y la Prevo tendrá que dejar este sitio peligroso para todos. En el nuevo edificio se incluirán tres niveles educativos: secundaria, bachillerato y profesional”.

Con aquel ofrecimiento tan generoso, Cisneros Zazueta se entrevistó con el Gobernador Constitucional del estado de Sinaloa, Leopoldo Sánchez Celis, quien a pregunta expresa le contestó: “Búscate el terreno en cualquier parte de Culiacán, y el que escojas será para el Instituto Tecnológico de Culiacán”. Escogió el terreno cerca de La Lomita (entre la Av. Álvaro Obregón y la Av. Nicolás Bravo).

El arquitecto Jaime Sevilla Poyastro, junto con el Ing. Arturo Ortiz, fueron los diseñadores del Instituto Tecnológico de Culiacán.

En 1967, surgió la inquietud de crear una Institución de Educación Tecnológica para atender los niveles de bachillerato y licenciatura, que coadyuvara en el desarrollo industrial del estado de Sinaloa. De manera particular, el Gobierno Estatal proyectó un programa de apoyo para la industrialización de los recursos agrícolas y pesqueros de la entidad, lo que creó la necesidad de recursos humanos con educación tecnológica de nivel licenciatura que realizara ese proyecto.

La educación superior en el estado de Sinaloa era ofrecida en ese momento por la Universidad Autónoma de Sinaloa, sin embargo, su catálogo de carreras profesionales no contemplaba la especialidad tecnológica.

Los esfuerzos de un grupo de profesionistas, apoyados por el C. Leopoldo Sánchez Celis, Gobernador de Sinaloa, derivaron en la creación del Instituto Tecnológico Regional de Culiacán #17, actualmente Instituto Tecnológico de Culiacán, bajo la dirección del primer director, el Ing. Óscar Ruiz Herrera (oriundo de Chihuahua).

Fue así que el 21 de mayo de 1968, a las 10:45, el C. Leopoldo Sánchez Celis, Gobernador Constitucional del estado de Sinaloa, inauguró simbólicamente las actividades del entonces ITRC, a través de la entrega de llaves al Ing. Luis Cisneros Zazueta, Director de la Escuela Técnica Industrial y Comercial No. 23, ETIC No. 23, (la antigua “Prevo”), que en esa misma fecha ocupó parte de las instalaciones del Tecnológico.

El Instituto Tecnológico de Culiacán inició labores en septiembre de 1968, en tanto que las clases dieron inicio el 04 de noviembre del mismo año, debido al caos que provocó el movimiento estudiantil del 68.

El ITC ofertaba opciones educativas en las áreas de ingeniería y tecnología. El compromiso, la capacidad de análisis con sentido crítico, la responsabilidad y el proponer soluciones adecuadas a las necesidades regionales, fueron y siguen siendo hoy en día, algunos de los principios básicos de la formación profesional que se ofrece.

La zona de influencia del Instituto Tecnológico Regional de Culiacán abarcaba los municipios de Angostura, Badiraguato, Concordia, Cosalá, Elota, Escuinapa, Mazatlán, Mocorito, El Rosario, Salvador Alvarado y San Ignacio.

Por tal motivo, este instituto fue considerado pionero de la educación tecnológica media superior y superior en Sinaloa, llegando a ser la mejor alternativa para la juventud sinaloense que tenía pocas oportunidades de emigrar a los centros tradicionales de educación, para obtener una formación tecnológica.

¿Cómo ha evolucionado el Instituto Tecnológico de Culiacán?

Inicialmente, el Instituto Tecnológico de Culiacán ofreció dos carreras de nivel medio superior y dos de nivel superior, con una matrícula de 273 estudiantes distribuidos de la siguiente manera: 70 en la carrera de Técnico en Máquinas y Herramientas, 148 en Técnico en Electricidad, 35 en Ingeniería Industrial Eléctrica y 20 en Ingeniería Industrial Mecánica.

En 1969, se amplió la oferta de carreras en el nivel medio superior, añadiendo las carreras de Técnico en Mecánica Automotriz y Técnico en Electrónica. En 1976 se abrieron las carreras de Técnico en Aire Acondicionado y Refrigeración, Ingeniería Bioquímica en Alimentos y Licenciatura en Informática.

A partir de septiembre de 1985, por disposición de la Secretaría de Educación Pública, se suspendieron las inscripciones para estudiantes de nuevo ingreso del nivel medio superior, dando inicio al proceso de segregación que culminó en 1988, quedando atendida la necesidad educativa de este nivel por otras instituciones.

En 1986, las carreras de Ingeniería Industrial Eléctrica e Ingeniería Industrial Mecánica se sometieron a un proceso de revisión y evaluación para llevar a cabo un rediseño curricular, concluyendo con la creación de las carreras de Ingeniería Eléctrica, Ingeniería Mecánica e Ingeniería Industrial.

Posteriormente, surgieron proyectos para la apertura de nuevos programas educativos, los que fueron presentados ante la Dirección General de Educación Superior Tecnológica (actualmente Tecnológico Nacional de México) para su análisis y respectiva autorización.

Las carreras de Ingeniería Bioquímica en Alimentos, Licenciatura en Informática y Sistemas Computacionales iniciaron la inscripción de alumnos en septiembre de 1976, concluyendo su período de oferta en febrero de 1980 y agosto de 1992, respectivamente. Finalmente, sus planes tuvieron una adecuación que implicó el cambio de nombre a Ingeniería Bioquímica y Licenciatura en Informática.

Derivada de estos proyectos, en 1991 el instituto ofreció por primera vez a la comunidad la carrera de Ingeniería Electrónica, iniciando el proceso de inscripción en septiembre de 1992.

En cuanto a posgrado, en 1994 se propuso el diseño curricular para la creación de la Maestría en Ciencias Computacionales, que fue autorizada a partir de septiembre de 1995 para ofrecerse a la juventud sinaloense.

La necesidad de manipulación de la información mediante sistemas, propició un análisis sobre la pertinencia de abrir una carrera que ofreciera la formación tecnológica que cubriera esta área de oportunidad, es por ello que en 2003, surgió la carrera de Ingeniería en Sistemas Computacionales.

La tendencia hacia la automatización de la industria mediante la robótica y el uso de las nuevas tecnologías ponen al Instituto en un estado de competitividad, siendo este el primero a nivel estatal en ofrecer la carrera de Ingeniería Mecatrónica en el año 2006.

Desde 2007, el Instituto Tecnológico de Culiacán está inscrito en el Registro Nacional de Instituciones y Empresas Científicas y Tecnológicas (Reniecyt), lo que ha permitido participar en convocatorias de Conacyt para obtener recursos adicionales.

Después de un análisis exhaustivo sobre la oferta educativa de los institutos tecnológicos a nivel nacional, la Dirección General de Educación Superior Tecnológica, actualmente Tecnológico Nacional de México, propuso la desaparición de las licenciaturas que no estuvieran enfocadas a las áreas de ingeniería y tecnología, con el objetivo de reorientarlas a la razón fundamental por la que fueron creadas; por lo que en el año 2009, se aceptó el ingreso de la última generación de estudiantes de la Licenciatura en Informática.

Con el cierre de esta carrera, se hizo necesario diseñar un programa educativo que estuviera a la vanguardia en términos de telecomunicaciones, y a su vez cumpliera con las especificaciones de este comunicado, por lo que en agosto de 2010, se abrieron las puertas para aquellos estudiantes que tuvieran interés en esta área del conocimiento, ofreciéndoles la nueva carrera de Ingeniería en Tecnologías de la Información y Comunicaciones.

En 2010, se abrieron las puertas de este instituto a profesionistas con nivel licenciatura que requerían de un estudio de posgrado, ofreciendo una segunda opción en este tipo de estudios: Maestría en Ingeniería Industrial.

En agosto de 2010, iniciaron clases en el Instituto Tecnológico de Culiacán, Extensión Navolato, en las instalaciones de la Escuela de Música de la UAS en Navolato, con una población escolar de 234 estudiantes, de los cuales 179 fueron de la carrera de Ingeniería Industrial y 55 de Ingeniería en Sistemas Computacionales.

Posteriormente, el 22 de noviembre de 2011, el Gobernador del Estado de Sinaloa, Lic. Mario López Valdez, realizó el corte de listón para inaugurar las nuevas instalaciones del Instituto Tecnológico de Culiacán, Extensión Navolato.

En enero de 2012 se abre la carrera en Ingeniería Ambiental, la cual tuvo su primer ingreso en agosto con una matrícula de 36 estudiantes. De igual forma, la carrera de Ingeniería en Energías Renovables se ofertó en agosto de 2013 para incrementar la oferta educativa del plantel, iniciando con 40 estudiantes.

Con la intención de ampliar la oferta educativa en programas de posgrado, en agosto de 2013 se ofertó por primera vez la Maestría en Ciencias de la Ingeniería, con tres líneas de investigación: Robótica y control, Instrumentación y Procesamiento de Señales y Biotecnología.

En agosto de 2014, se ofrece por primera vez la carrera de Ingeniería en Gestión Empresarial, logrando una matrícula de 120 estudiantes.

También en agosto de 2014, se documenta la solicitud ante el Tecnológico Nacional de México para la apertura del Doctorado en Ciencias de la Ingeniería, el cual contempla tres líneas de investigación: Sistemas Computacionales, Bioprocesos y Sistemas Ambientales e Instrumentación y Control. En octubre del mismo año, se aprueba este posgrado que dio inicio en agosto de 2015, con una matrícula de dos estudiantes.

El 01 de octubre de 2015, se aprobó la incorporación del programa de Doctorado en Ciencias de la Ingeniería al Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC) de Conacyt, en el nivel de reciente creación, con vigencia a diciembre de 2019. Este reconocimiento lo convierte en el primer programa de Doctorado del Tecnológico Nacional de México (TecNM) en el estado de Sinaloa, ofreciendo una oportunidad para formar capital humano de alto nivel en la región.

En el semestre #96 se impartió por primera vez una materia 100% en inglés, de la carrera de Ingeniería en Gestión Empresarial.

Directores del Instituto Tecnológico de Culiacán
  1. Ing. Óscar Ruiz Herrera (septiembre de 1968 – agosto de 1970)
  2. Ing. José Luis Hernández Osuna (enero de 1970 – agosto de 1971)
  3. Ing. Ricardo Ramírez Vidal (agosto de 1971 – abril de 1972)
  4. Ing. Juan Pérez Félix (mayo de 1972 – agosto de 1974)
  5. Ing. Enrique Mejía Gutiérrez (agosto de 1974 – agosto de 1975)
  6. C.P. Israel Rivera Romero (octubre de 1975 – enero de 1977)
  7. Ing. Jaime Zaragoza Bueno (febrero de 1977 – diciembre de 1977)
  8. Ing. Gilberto Morillón Piedra (mayo de 1978 – junio de 1980)
  9. Ing. Eugenio Miranda Medina (junio de 1980 – febrero de 1982)
  10. Ing. Víctor Hugo Monzón Ruelas (marzo de 1982 – marzo de 1985)
  11. Ing. Gildardo Loya Pacheco (abril de 1985 – junio de 1986)
  12. Ing. José Fausto León Jacobo (julio de 1986 – marzo de 1988)
  13. Ing. Francisco Javier Mozqueda Alarcón (marzo de 1988 – septiembre de 1996)
  14. MC. Francisco Miguel Cabanillas Beltrán (septiembre de 1996 – enero de 2000)
  15. Ing. José Valderrama Vela (enero de 2000 – octubre de 2000)
  16. Ing. Antonio Enrique Leal Cruz (octubre de 2000 – noviembre de 2000)
  17. Dr. Roberto de Jesús Avena Bustillos (noviembre de 2000 – noviembre de 2003)
  18. Ing. Juan Gamboa García (septiembre de 2003 – noviembre de 2004)
  19. Ing. Gustavo Apodaca Lugo (noviembre de 2004 – noviembre de 2005)
  20. Ing. José Luis Méndez Navarro (noviembre de 2005 – septiembre de 2007)
  21. Ing. Francisco Rafael Saldaña Ibarra (septiembre de 2007 – agosto de 2013)
  22. Ing. José Guillermo Cárdenas López (agosto de 2013 – abril de 2019)
  23. Dr. José Rigoberto Raygoza Viera (abril de 2019- octubre de 2019)
  24. MC. Norman Salvador Elenes Uriarte (octubre de 2019-enero de 2023)
  25. MEH. Francisca Piña Zazueta (febrero 2023-actualmente)
¿Cómo surge el lema institucional?

A principios de 1971, el entonces Subdirector del ITC, Ing. Manuel Placencia propuso el lema: “Con la técnica al progreso”.

El Ing. Martín López Rito era el Director General cuando se creó el Instituto Tecnológico de Culiacán y en una entrevista publicada en una revista habló del progreso y desarrollo. De esa entrevista se tomó la palabra «progreso» para conformar lo que sería el lema de la institución.

Progreso es desarrollo, autorrealización de carácter personal en el marco de la tecnología y a la vez la realización de estos proyectos.

Por otra parte, la «técnica» se encamina hacia el procedimiento, hacia el método visto desde lo intelectual, desde el quehacer en el marco de la producción.

¿Cómo surge el logotipo institucional?

El logotipo lo enviaron casi diseñado de Dirección General con el engrane del Instituto Politécnico Nacional. La industria era una ventana y una puerta de cortina con un solo pitón, el engrane no estaba en tercera dimensión y se señalaba el punto exacto de Culiacán en el mapa de Sinaloa. La torre originalmente tenía brazos y tres alambres conductores, como de electricidad. Los colores eran lila pastel y naranja. Federico Hernández (q.e.p.d.) fue quien propuso el engrane en tercera dimensión.

Los directivos de la institución junto con el H. Consejo Estudiantil y los Jefes de Departamento de aquel entonces, decidieron lanzar el diseño de un logotipo a concurso, sin embargo, sólo recibieron gráficos como objetos vestidos de laureles, el lábaro patrio, el águila que conforma la bandera de México, sin lograr convencer a las autoridades para establecer alguno de esos logotipos como imagen institucional.

En esos tiempos, el C.P. Israel Rivera Romero, Director de la institución (octubre de 1975- enero de 1977), convocó a una reunión en la que decidieron agrupar símbolos que representaran a los campos agrícolas, a la industria y a la electricidad.

Finalmente, el director Israel Rivera Romero fue quien tomó la decisión de elegir ese logotipo. También participaron Manuel Placencia, Jesús González Tapia, Guido Guadalupe Gutiérrez, Aristeo López Monroy y Marco Antonio Flores.

Los colores institucionales nacieron de un compromiso de participar en una competencia deportiva y surgieron al azar, buscando algo muy sencillo que se pusiera en los uniformes.

Los elementos que conforman el logotipo del Instituto Tecnológico de Culiacán simbolizan las dos carreras de nivel superior con las que inició la institución: la industria y la torre representan la carrera de Ingeniería Industrial Eléctrica; y la industria y el engrane representan la carrera de Ingeniería Industrial Mecánica.

Con el paso de los años y la ampliación de la oferta educativa del plantel se agregó una antena parabólica como imagen representativa de la electrónica.

En el 2008, el logotipo tomó nueva forma: se agregó un círculo color morado que engloba a los elementos anteriores del logotipo, conservando los mismos colores para mantener en armonía el concepto. Asimismo, se rediseñó el lugar del nombre de la institución y el lema dentro del círculo agregado. Este logotipo se utilizó en las hojas membretadas de la institución a partir de enero de 2009.

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